Pero quedaba aún el broche final, conocer la empresa por dentro. Recorrer cada uno de los departamentos y ponerle cara y nombre a cada una de las personas que se encarga de la fabricación, producción, envasado y almacenaje de las prendas. Casi dos horas de recorrido en el que las tiendas pudieron vivir en sus propias manos el proceso íntegro de cada culote, maillot y chaqueta.